A falta de unos pocos días para que se cumpla un año desde el despido de nuestra compañera en la empresa de construcción de piscinas SUMMERGE, el empresario y dueño de esta empresa Francisco Jesús Guillermo Cobacho ha pagado todo el dinero que debía a nuestra compañera.
A la injusticia y la ilegalidad de aquel despido, se unen la humillación y el esfuerzo de todo un año reclamando un dinero que, tal vez, resulta insignificante para el empresario pero que es muy necesario para la subsistencia de nuestra compañera y de cualquier trabajador.
Gracias al apoyo de lxs compañerxs, conocidxs y amigxs que, de forma desinteresada y anónima, han prestado su apoyo y solidaridad, por fin hemos alcanzado el objetivo que perseguíamos: que nuestra compañera cobrara íntegramente el dinero que había ganado con su propio esfuerzo y sufrimiento.
Una oleada de llamadas, correos, faxes... con el mensaje "¡PAGA LO QUE DEBES A NUESTRA COMPAÑERA DESPEDIDA!" ha terminado dando el resultado por todxs esperado. Tal ha sido la presión a la que se ha visto sometido este empresario, que llegó a verse obligado a cambiar el número de fax de la empresa en un intento por eludir la presión que, entre todxs, estábamos haciendo.
Una vez más, la solidaridad ha logrado una pequeña victoria que nos estimula para seguir viviendo una vida orientada al apoyo mutuo y la solidaridad entre todos los seres sintientes de este planeta.
Conseguido nuestro objetivo, damos por finalizada la campaña solidaria con esta compañera y anunciamos el cese inmediato de las acciones solidarias, no sin antes dar las gracias a todas aquellas personas que nos habéis apoyado en esta pequeña pero importante lucha.
¡GRACIAS COMPAÑERXS!
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